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18 agosto 2006

Polilla...

¿De qué vale otro día en la vida?
Vale sentir el cariño de los amigos, el brillo en los ojos de quien te ve como su razón para no quedarse en la cama, el zumbido de los coches en la ciudad; vale la miel y la mierda de todos los días, el espanto de ver que cada vez estamos más empecinados en la autoextinción; vale querer cambiar todo, intentar ese viaje místico hacia tu alma, hacia lo desconocido; vale el dolor y la risa; vale el destino que modificas en cada paso...
De cada día vale hasta la muerte de los ángeles, de cada día vale hasta que los demonios estén vivos...No me vale regalarle horas a la parca, y no quiero que lo hagas tampoco.
Vive, porque estás en este baile para demostrar que valemos la pena...

Ya sabés, que por más lejos que estemos, no dejo de preocuparme porque vivas...