|

10 abril 2007

Presente

¿Qué tal si dejaras de pensar en el pasado?
Si dedicaras tus momentos a ver los rayos del sol, la llovizna en tu camino a un encuentro; si observaras los rostros que se cruzan, felices, apesadumbrados, arrepentidos o en plena algarabía; si rescataras del exilio a tu sonrisa, y permitieras que se enamoren de ella; si reclutaras a todas tus fuerzas para ganar la batalla contra el desasosiego, contra los momentos vacíos del ayer.
Si redimieras en abrazos a los hombros cansados, si devolvieras en besos las palabras que te regalan, si mataras la tristeza en los demás con tu belleza.
Si dejaras de airarte por problemas que no te pertenecen y, aunque te toquen en el pecho, no valen la pena de sufrirlos.
Si no fuera tan dificil convencerte...

...solo te quedaría la felicidad.